El pasado lunes día 30 el portavoz del Gobierno de Navarra, Alberto Catalán, manifestó en rueda de prensa que el informe de la Cámara de Comptos sobre la gestión del Departamento de Bienestar Social incluye valoraciones que responden ?a criterios personales y políticos? del autor. Ante esta afirmación, la Cámara de Comptos quiere manifestar lo siguiente:
1. La acusación del portavoz del Gobierno de Navarra, se supone que realizada en representación del ejecutivo, nos parece grave e injusta. Como presidente de la Cámara de Comptos, la considero grave porque pone en cuestión la credibilidad de nuestra labor, basada en la independencia de la institución, la profesionalidad de nuestros auditores y el carácter técnico del trabajo de fiscalización de los fondos públicos. E injusta, porque me parece que está fuera de lugar realizar semejante acusación sin aportar prueba alguna.
2. La Cámara de Comptos se reafirma en el contenido del informe sobre el Departamento de Bienestar Social, realizado tras una petición del Parlamento de Navarra. Al igual que cualquier informe de fiscalización, ha sido realizado tras un detallado y riguroso proceso de planificación, ejecución y control, además de haberse contrastado con los responsables del departamento y enviado a la consejera para que pudiera realizar alegaciones antes de hacerse público. Lejos de detectarse las críticas manifestadas por el portavoz del Gobierno, la consejera expresó lo siguiente en las alegaciones remitidas a la Cámara de Comptos: ?en general, se comparte el contenido del informe, tanto en cuanto a los datos en él contenidos referidos a la actividad del Departamento, como en cuanto a las recomendaciones que se realizan en aras de una mejora en la gestión de las prestaciones?.
3. La Cámara de Comptos está obligada a analizar la gestión de los fondos públicos, detectar los puntos débiles y ofrecer recomendaciones para que cada euro de dinero público que los ciudadanos aportan se utilice de la mejor manera posible. La labor de la Cámara de Comptos, como la de cualquier organización, es mejorable y, por tanto, estamos sujetos a la crítica. Sin embargo, como auditores públicos tenemos muy presente que las afirmaciones tienen que estar basadas en la evidencia, es decir, en la prueba.
4. Dada la gravedad de la acusación, que pone en entredicho la independencia y el rigor técnico de la institución y sus técnicos, como presidente de la misma considero que el portavoz del Gobierno debería acreditar sus afirmaciones o, en caso contrario, rectificarlas públicamente.
Luis Muñoz Garde
Presidente de la Cámara de Comptos de Navarra