2013/08 Los servicios de atención residencial y diurna en el ámbito de la dependencia en Navarra, 2008-2012

La Cámara de Comptos ha remitido al Parlamento un informe de fiscalización sobre los servicios de atención residencial y diurna en el ámbito de la dependencia. Dicho informe analiza la evolución de esos servicios en los últimos años, el gasto público destinado y ofrece una estimación del gasto por plaza en los centros públicos con gestión directa, comparándolo con las tarifas abonadas a centros privados por prestaciones similares. 

El informe señala que el Gobierno de Navarra gastó el año pasado 119 millones en atención residencial y diurna, cifra en la que se incluye tanto la gestión de los centros de la tercera edad, discapacitados y enfermos mentales como las ayudas de asistencia y las destinadas al pago de residencias privadas. 

El gasto en este tipo de asistencia ha aumentado un 15% desde 2008. Se observa un notable aumento de gasto en la gestión ajena de centros de la tercera edad, que pasa de 20 a 40 millones. El gasto en centros propios, por el contrario, ha disminuido desde los 16 millones de 2008 a los 13 del año pasado. 

Existe un aumento de las plazas de residencia para la tercera edad, que pasan de 1.233 en 2008 a 1.989 el año pasado. Las plazas de centro de día sumaban 110 en 2012, no habiendo experimentado apenas variación. 

En el al ámbito de la discapacidad, las plazas residenciales suman 480, las de centro de día 229 y las plazas en pisos funcionales son las que más han aumentado, pasando en los últimos años de 55 a 98. 

Por lo que se refiere a enfermos mentales, ha aumentado la oferta tanto de plazas en residencia como en centros de día y centros de rehabilitación psicosocial, sumando en total algo más de 400 plazas. 



En definitiva, la tendencia observada es un aumento de plazas en la mayoría de servicios debido a una mayor contratación en el ámbito privado. La excepción se da en el caso de la enfermedad mental, cuyas plazas se incrementan por la apertura del centro público Félix Garrido. 

El informe analiza también la evolución del gasto público destinado a estos servicios. En el ámbito de la tercera edad se observa un aumento del 60%, habiendo pasado de 30 a 47 millones. El aumento responde a los contratos con organizaciones privadas para la gestión de centros propios y ajenos, ya que el gasto en centros propios con gestión pública ha disminuido. Parecida evolución exixte en el ámbito de la discapacidad, donde aumentan los contratos de gestión de centros propios y ajenos, mientras disminuye el gasto en gestión pública de centros. En total, dicho ámbito supuso un gasto de 33 millones en 2012. 

El informe analiza también la gestión de los contratos para la prestación de estos servicios. Actualmente existe una gran variedad de módulos para la misma prestación, fruto de la negociación en función de las características de cada centro en cuanto a personal, servicios, etc. A pesar del esfuerzo realizado por el Departamento de Políticas Sociales para racionalizar los módulos, el informe ha detectado deficiencias relacionadas con la medición de la calidad de la atención y la eficacia en los recursos. 

La Cámara de Comptos recomienda diseñar un modelo asistencial homogéneo en los centros de tercera edad, con un único módulo económico que garantice el mismo nivel de calidad para todos los usuarios. También sugiere que se utilice la modalidad de contrato de concesión de gestión de servicios para futuras adjudicaciones y no el de asistencia. El informe aboga asimismo por reforzar el papel del Servicio de Inspección por la importancia de su cometido, que permite comprobar si se cumplen las condiciones que justifican los precios abonados.