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2004/29 Ayuntamiento de Berriozar, 2003

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2004/29 Ayuntamiento de Berriozar, 2003 ()

La Cámara de Comptos de Navarra ha remitido al Parlamento el informe de fiscalización del Ayuntamiento de Berriozar, población de 7.577 habitantes, correspondiente al ejercicio de 2003. El trabajo analiza la ejecución presupuestaria, la situación patrimonial, el cumplimiento de la legalidad y la situación financiera.

Según indica el informe, en 2003 el Ayuntamiento de Berriozar gastó 8 millones de euros e ingresó 6,8 millones. Aunque al cierre del ejercicio existía un déficit de 1,2 millones, el presupuesto ajustado da un superávit de 137.000 euros ya que se han financiado obligaciones con el remanente de tesorería del ejercicio anterior.

El informe señala que la deuda a 31 de diciembre de 2003 ascendía a 1,1 millones de euros, con un ahorro neto (diferencia entre ingresos y gastos corrientes) del 5 por ciento y un remanente de tesorería de 24.000 euros.

La Cámara de Comptos advierte de que la situación financiera de Berriozar presenta una tendencia deficitaria, consecuencia del agotamiento de los recursos procedentes del urbanismo. A juicio de la Cámara de Comptos, esta situación exige un plan de viabilidad que debería analizar los servicios municipales, su coste y el modo de financiarlos. El objetivo de dicho plan debe ser recuperar el equilibrio financiero del ayuntamiento.

Analizada la liquidación presupuestaria, el informe indica que refleja de manera adecuada la actividad realizada y la situación presupuestaria. También el balance de situación es fiel reflejo de la situación financiera y patrimonial. En cuanto al cumplimiento de la legalidad, el informe señala que el Ayuntamiento de Berriozar cumple la normativa vigente.

En definitiva, la Cámara de Comptos considera que el Ayuntamiento de Berriozar gestiona de una manera adecuada sus presupuestos. Asimismo, en los últimos años se han mejorado notablemente los procedimientos administrativos y de control interno siguiendo las recomendaciones de los últimos informes de fiscalización. Sin embargo, se mantiene un problema estructural en la situación económica del municipio: la negativa evolución económica consecuencia de la disminución de los ingresos urbanísticos.