2012/05 Ayuntamiento de Estella-Lizarra ejercicio 2010

La Cámara de Comptos ha publicado el informe sobre el Ayuntamiento de Estella-Lizarra, correspondiente a 2010, que analiza la cuenta general, el cumplimiento de la legalidad y la situación financiera del consistorio. 

El informe señala que los gastos del ayuntamiento sumaron 16,3 millones y los ingresos 17,5 millones, cifras que incluyen las del Patronato de Música Julián Romano. 

En el capítulo de gastos destacan los casi seis millones destinados a personal, un importe similar gastado en inversiones y los 3,5 millones de gastos corrientes en bienes y servicios. 

En cuanto a los ingresos, las transferencias de capital suman seis millones, los impuestos y tasas 5,7 millones y las transferencias corrientes 5,4 millones. 

En el ejercicio de 2010 los gastos del Ayuntamiento de Estella disminuyeron un 11% y la recaudación también descendió, en este caso en un 10%. La reducción en gastos se explica fundamentalmente por la menor inversión realizada. 

El Ayuntamiento de Estella finalizó el ejercicio con un superávit de 0,67 millones, frente a los 1,8 millones del año anterior, y un remanente de tesorería de 2,6 millones que disminuyó notablemente respecto a 2009. La deuda a largo plazo suma 6,7 millones frente a los 7 millones del ejercicio anterior. 

Analizada la cuenta general del Ayuntamiento, el informe dice que expresa la imagen fiel de la liquidación de gastos e ingresos y situación patrimonial, salvo por el hecho de no tener actualizado el inventario que data de 1995. 

En cuanto a la legalidad, la actividad económica del ayuntamiento y su organismo autónomo se desarrolló, en general, respetando la normativa vigente. No obstante, la Cámara de Comptos ha observado incumplimientos de la normativa de contratación administrativa, referidos especialmente que no consta la documentación básica en los expedientes y a la ausencia de seguimiento en los plazos de ejecución de las inversiones 



El informe finaliza pidiendo un plan económico financiero que permita contener gastos corrientes y aumentar la capacidad de generar recursos ordinarios. Asimismo, considera necesario adecuar las tarifas y precios al coste del servicio, controlar los gastos de personal, priorizar inversiones, revisar la política de subvenciones y autofinanciar los servicios no obligatorios.