2013/23 Plan Moderna (2008-2012)

La Cámara de Comptos de Navarra ha remitido al Parlamento el informe sobre el Plan Moderna, solicitado por el Parlamento a instancias del grupo parlamentario de Bildu-Nafarroa. El objetivo del informe es comprobar las aportaciones del Gobierno de Navarra al Plan Moderna, sus actividades, cuentas y funcionamiento.

El informe explica que en 2008 el Gobierno, la Confederación de Empresarios y los sindicatos UGT y CCOO firmaron un acuerdo para el desarrollo sostenible de Navarra. El ejecutivo encomendó a la sociedad pública Anain la elaboración del Plan Moderna, cuyo objetivo era impulsar el cambio hacia una economía basada en el conocimiento. Todo ello con el propósito de situar a Navarra entre las veinte primeras regiones europeas en PIB per cápita.

Finalmente, en 2011 se constituyó la Fundación Moderna como órgano de colaboración público-privada para gestionar el plan. Dicho plan tiene tres áreas de actuación: economía verde, economía de la salud y economía del talento, con sus proyectos e instrumentos entre los que figura el sello moderna, la beca emprendedor Moderna, fondos Moderna para co-inversión, foro Moderna y financiación del Banco Europeo.

En su labor de dinamización, la fundación ha trabajado en diversos proyectos sectoriales, entre los que se pueden citar el cluster agroalimentario, el vehículo sostenible, el plan de acción de Tudela y el compromiso y liderazgo político.

El patronato de la fundación es un órgano colegiado de 31 miembros de los que 11 los designa el Gobierno de Navarra, cinco el Parlamento y 15 las entidades promotoras. Existe también un Comité Permanente con 19 miembros.

El informe señala que en el periodo 2008-2012 el Gobierno de Navarra ha gastado 3,2 millones en el Plan Moderna. La parte más importante (casi dos millones) corresponde a las encomiendas hechas a la citada empresa pública que, a su vez, pagó la mayor parte de esa cantidad a la consultora que ha colaborado en la elaboración del plan. Existe otra partida de 600.000 euros abonada a la Fundación Navarra para la Diversificación del Tejido Industrial, que se había encargado de los primeros estudios.

En cuanto al gasto de funcionamiento de la fundación, el año pasado ascendió a 630.000 euros de los que casi 380.000 corresponden a los salarios de sus ocho empleados. Las cuentas de la fundación están auditadas por profesionales externos y cuentan con opinión favorable.

La Cámara de Comptos se refiere también a la naturaleza privada de la fundación, señalando que debería haberse constituido como pública ya que tanto su finalidad como su financiación tienen ese carácter. De hecho, los servicios jurídicos del Parlamento ya se pronunciaron en el mismo sentido.

El informe señala que durante el primer año los fondos de la fundación han dependido exclusivamente de las partidas asignadas en los presupuestos, aunque este año se ha previsto que un 25% provenga de otras fuentes.

Junto al objetivo general de cambiar el modelo económico de Navarra, la actividad más visible de la fundación es la concesión del sello Moderna, requisito para acceder a la financiación del Banco Europeo de Inversiones y al aval Moderna. El Banco Europeo acordó facilitar un crédito de 250 millones para financiar a las pequeñas empresas. Hasta ahora, se han solicitado 100 millones cuya gestión depende de Sodena. No obstante, Sodena no presta directamente a las empresas sino indirectamente mediante préstamos a las entidades financieras. La empresa pública también avala hasta un 30% de estos préstamos.

En 2012 la fundación concedió 228 sellos, se firmaron 69 operaciones financieras con una financiación del Banco Europeo de 16,4 millones y Sodena dio 3,5 millones en avales. La inversión prevista en esas operaciones sumaba 37 millones.

La Cámara de Comptos no se pronuncia sobre la eficacia de la labor de la fundación hasta el momento, teniendo en cuenta que se trata de un plan con objetivos a treinta años vista. No obstante, valora positivamente que se elabore un plan de desarrollo para Navarra a medio o largo plazo abierto a la participación del sector privado.

En cuanto a las recomendaciones, pide un mayor seguimiento de los proyectos que obtienen el sello. Teniendo en cuenta que la financiación no depende de la obtención del sello sino de la decisión de la entidad financiera correspondiente, el informe recomienda buscar otras alternativas para incidir en el mercado financiero.

El informe también sugiere modificar el plan para prestar más atención a otras medidas que mejoren la actual situación de crisis. Asimismo, pone de relieve que se trata de una fundación sin patrimonio ni dotación suficiente, dependiente por tanto todos los años de la partida presupuestaria correspondiente, lo que contrasta con objetivos y gestión a largo plazo.