1999/03 Gestión del Medio Ambiente, 1997

La Cámara de Comptos de Navarra ha remitido al Parlamento un informe sobre el programa presupuestario "Gestión del Medio Ambiente". El objetivo de dicho programa, cuyo presupuesto ejecutado superó el año pasado los 3.000 millones de pesetas, es evitar o minimizar los impactos de las actividades humanas en el medio ambiente tratando de favorecer la calidad ambiental, la conservación de la naturaleza y la ordenación forestal. De la gestión de este programa se encargan 214 personas de las que 138 son guardas de medio ambiente y celadores de montes.

El trabajo de la Cámara de Comptos parte de una limitación en cuanto a su alcance, ya que la insuficiente definición y cuantificación de los objetivos e indicadores del programa, así como la falta de un seguimiento sistemático del mismo, dificultan el análisis de su eficacia.

Además del capítulo de personal, en el que se gastaron 736 millones, en la ejecución presupuestaria destacan los gastos en repoblaciones, corrección de la erosión, prevención de incendios y ordenación de los montes cuyo gasto ascendió el año pasado a 1.800 millones. En cuanto a los ingresos, que sumaron 1.411 millones, la mayor parte corresponde a fondos europeos destinados a proyectos medioambientales y de ordenación forestal, aspecto este último por el que se ingresaron 923 millones.

En las conclusiones del informe la Cámara de Comptos señala que los objetivos del programa presupuestario se presentan de una forma muy genérica, con unos indicadores que se limitan a cuantificar la gestión administrativa. Tampoco se realiza un seguimiento específico de la ejecución y cumplimiento de los objetivos, ni existe una memoria anual de las actuaciones realizadas.

El Departamento de Medio Ambiente no gestiona las partidas más importantes de ingresos ya que éstas proceden de los fondos europeos y el departamento se limita a contabilizarlos.

Por lo que se refiere a la legalidad, la Cámara de Comptos indica que, en general, las actuaciones revisadas respetan los principios de la contratación pública, si bien existen algunas excepciones que se detallan en el informe.

Respecto a la organización y control interno, el informe recuerda que los aspectos medioambientales han sido asumidos por las administraciones públicas hace relativamente poco y, por tanto, el Departamento de Medio Ambiente ha vivido una importante evolución con ampliación de competencias. Esto implica que se trata de un departamento en proceso de consolidación, circunstancia a la que hay que añadir los continuos cambios en la estructura interna del mismo.

La ubicación en diferentes sedes y la inexistencia de un archivo general del Departamento también son obstáculos a la hora de un funcionamiento ágil y eficaz, sobre todo en lo referente a la localización y manejo de documentación.

En el análisis de la eficacia del programa, el informe subraya la limitación que supone el hecho de que los objetivos e indicadores no estén suficientemente definidos y cuantificados. No obstante, la Cámara de Comptos señala que la realización de estudios para poner en marcha planes de conservación de especies amenazadas, obligación impuesta por la Ley Foral para la Protección de la Fauna Silvestre y sus Hábitats, no ha dado paso a la elaboración de dichos planes. Por ello, el informe considera que la gestión de ese programa en lo referente a la protección de la fauna es incompleta.

La Cámara de Comptos subraya que la realización de esos planes es muy importante a la hora de tomar decisiones. Así, por ejemplo, en los últimos años el Departamento de Medio Ambiente se ha esforzado por mantener la avutarda y, sin embargo, los últimos estudios disponibles concluyen la escasa viabilidad de esa especie en Navarra.

Por todo ello, la Cámara de Comptos recomienda impulsar la elaboración de planes plurianuales que favorezcan la gestión de las diferentes actividades. El informe indica que es importante definir unos criterios generales para aprovechar de forma óptima los recursos dedicados a la protección y conservación de la fauna y flora, dedicándolos a las especies de mayor interés.

La Cámara de Comptos cree necesario también que el Departamento de Medio Ambiente consiga estabilidad en cuanto a sus competencias y estructura interna, lo cual favorecerá la mejora de la gestión.