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2002/07 Universidad Pública de Navarra y Fundación Universidad-Sociedad, 1999-2000

Fecha publicación

La Cámara de Comptos de Navarra ha remitido al Parlamento el informe sobre la Universidad Pública de Navarra correspondiente a los ejercicios de 1999 y 2000. El trabajo incluye también la opinión correspondiente a la Fundación Universidad-Sociedad, creada por acuerdo de la Junta de Gobierno de la universidad en 1996.

El informe tiene por objeto emitir opinión acerca de los siguientes aspectos: la ejecución de los presupuestos de ingresos y gastos; la situación patrimonial; el sometimiento de la actividad económica al principio de la legalidad; y el grado de cumplimiento de las recomendaciones emitidas en anteriores informes. La Cámara de Comptos ofrece también conclusiones relativas al personal docente e investigador y a la evolución del número de alumnos.

En el ejercicio de 2000 la Universidad Pública de Navarra tuvo unos ingresos de 8.236 millones de pesetas, lo que supuso un aumento del 11% respecto a los datos del año anterior. La mayor parte de esa cantidad (6.726 millones) corresponde a las transferencias corrientes y de capital recibidas de la Administración Foral. El informe constata que la financiación de la universidad está vinculada en un 80% a las transferencias mientras que los ingresos propios -fundamentalmente las tasas de matrícula- cubren el restante 20%.

En cuanto a los gastos, en el ejercicio de 2000 ascendieron a 7.725 millones de pesetas, de los que 4.233 millones se destinaron a personal, alrededor de 1.900 millones a bienes corrientes y servicios y 1.268 millones a inversiones.

La Cámara de Comptos señala en el informe que las liquidaciones presupuestarias de 1999 y 2000 reflejan la actividad desarrollada por la universidad, aunque existen algunos errores de imputación temporal al cierre del ejercicio.

En cuanto al balance de situación, la Cámara de Comptos no emite opinión debido a una serie de salvedades referidas al inmovilizado y a los saldos de deudores y acreedores presupuestarios. En este sentido, el informe indica que no se concilia sistemáticamente la información de las cuentas de balance y el inventario, ni la contabilidad general y la presupuestaria. En cuanto a los deudores presupuestarios por derechos de matrícula, no están documentalmente respaldados y en los saldos de acreedores no se aplica el principio de devengo ni las normas contables de cierre.

Por lo que se refiere a la legalidad, la Cámara de Comptos ha apreciado diversos incumplimientos en materia de personal, contratación administrativa y cumplimiento de las obligaciones fiscales en materia de IVA que se detallan a lo largo del informe.

El informe enumera una serie de aspectos que se han mejorado a raíz de anteriores fiscalizaciones, tales como la implantación del nuevo sistema contable, la puesta en marcha de la Intervención y el modelo estable de financiación firmado con el Gobierno de Navarra. No obstante, existen bastantes aspectos de la gestión que deben mejorarse, tanto desde el punto de vista de la organización general como de personal, contratación, proyectos de investigación, tesorería, inmovilizado y relaciones entre la universidad y la Fundación Universidad-Sociedad. El desfase temporal entre el ejercicio fiscalizado y la publicación del informe explica que algunas de las deficiencias detectadas estén actualmente en vías de solución, tal y como explican los responsables de la Universidad en las alegaciones presentadas a la Cámara de Comptos.

Respecto a la organización general, el informe recomienda implantar procedimientos que permita conciliar y contrastar sistemáticamente la información contable de todas las unidades de gestión y servicios de contabilidad. También considera necesario destinar más personal a la Intervención para mejorar el control interno y aplicar procedimientos generales que garanticen la correcta formación y tramitación de los expedientes administrativos.

La Cámara de Comptos cree que se debe implantar un sistema integrado de gestión de personal y elaborar la plantilla orgánica del personal docente e investigador. Respecto a la contratación, solicita que se refuercen los mecanismos de control y seguimiento de contrataciones e inversiones. La gestión de los proyectos de investigación también debería mejorarse a través de un reglamento que regule el proceso de tramitación y control.

El informe ofrece un análisis sobre el personal docente e investigador según el cual a finales de 2000 la Universidad Pública de Navarra tenía 693 profesores de los que el 49% era permanente y el 51% contratado. Al comparar los datos de profesorado con la estructura estándar fijada como objetivo a medio plazo se comprueba que existe menos proporción de catedráticos y profesores titulares, mientras que el porcentaje de asociados (33%) es bastante superior al previsto.

Respecto a la evolución en el número de alumnos, desde el curso 1996/97 hasta el 2000/2001 el alumnado ha descendido un 10% hasta situarse en 8.940 estudiantes. Destacan las disminuciones en la diplomatura de Relaciones Laborales, Sociología e Ingeniería Agrónoma. "El descenso de natalidad y la potenciación de la formación profesional -señala el informe- hacen prever que la tendencia de reducción del número de alumnos se mantendrá en los próximos ejercicios e incluso puede acentuarse".