2006/10 Subvenciones concedidas por el Gobierno de Navarra a la Fundación Humanismo y Democracia (ejercicios 2000 a 2005)

Subvenciones concedidas por el Gobierno de Navarra a la Fundación Humanismo y Democracia (ejercicios 2000 a 2005)

La Cámara de Comptos de Navarra ha hecho público el informe de fiscalización sobre las subvenciones concedidas por el Gobierno de Navarra a la Fundación Humanismo y Democracia en el periodo 2000-2005. El trabajo se ha realizado atendiendo una solicitud del Parlamento de Navarra que, a instancias del grupo Izquierda Unida-Ezker Batua, pidió la elaboración de “un informe de fiscalización urgente y prioritario de todas las subvenciones concedidas por el Gobierno de Navarra a la Fundación Humanismo y Democracia en los ejercicios de 2000 a 2005”.

El informe explica que la Fundación Humanismo y Democracia, constituida en 1978, tiene como objetivos la realización de estudios e investigaciones sobre temas sociales, la cooperación internacional, la divulgación de los valores europeos, los ideales humanistas y demócratas-cristianos y la promoción de servicios y actividades sociales, en especial a favor de los más desfavorecidos.

Las subvenciones concedidas por el Gobierno de Navarra a esta fundación se enmarcan dentro de las ayudas al desarrollo, convocadas anualmente por el Departamento de Bienestar Social, Deporte y Juventud del Gobierno de Navarra. De su gestión se ocupa el Servicio de Cooperación Internacional al Desarrollo.

El objetivo del informe es determinar las subvenciones concedidas en los últimos cinco años, verificar si la entidad beneficiaria ha justificado adecuadamente la aplicación de dichas subvenciones y pronunciarse sobre los mecanismos de control interno del Gobierno de Navarra.

La Cámara de Comptos ha analizado las ayudas que el Gobierno de Navarra otorgó a la fundación entre 2000 y 2004, puesto que en 2005 Humanismo y Democracia no solicitó ninguna subvención. De ese análisis se desprende que en ese periodo la fundación recibió 15 subvenciones por un importe de dos millones de euros, de los que se han pagado 1,1 millones. Se trata de proyectos para construcción de viviendas, centros profesionales, cursos de formación en gestión de alta dirección, envío de medicamentos, asistencia técnica, formación a profesionales de la salud y ayuda humanitaria en países como Perú, Brasil, Kosovo, República Dominicana, Irak y Bolivia. Las subvenciones suponen el 60 por ciento del coste de dichos proyectos.

En el proceso de revisión de las subvenciones concedidas, el Departamento de Bienestar Social detectó en noviembre de 2004 unas facturas justificativas de retribuciones por asesoramiento para un proyecto en la República Dominicana a nombre de un alto cargo y dos funcionarios del Gobierno de Navarra. Como consecuencia de esto, se inició un proceso de control y revisión de toda la documentación presentada que detectó gastos y actuaciones deficientemente justificadas. Esto dio lugar a la apertura de un expediente de reintegro y, paralelamente, se trasladaron los hechos a la Fiscalía ante los indicios de delitos contra la hacienda pública, cohecho y falsedad documental.

De los 1,19 millones de euros concedidos a la fundación, ésta ha presentado justificaciones de gasto por importe de 1,09 millones aunque el Gobierno ha detectado anomalías en 570.000 euros correspondientes a cuatro proyectos: Programa de formación para profesionales en técnicas de salud, gerencia hospitalaria y desarrollo sostenible en la República Dominicana, Asistencia técnica y formación a profesionales de la salud en Bolivia, Mejora de los sistemas de gestión hospitalaria en la República Dominicana y Desarrollo de un plan integral de urgencias sanitarias en La Paz (Bolivia).

Además de enviar estos expedientes al fiscal, el Gobierno de Navarra ha reclamado el reintegro de las subvenciones. Hay otro proyecto denominado “Curso de formación en gestión de alta dirección”, previsto para desarrollarlo en Perú, que no se ejecutó y cuya subvención fue devuelta a instancias del Gobierno de Navarra. Finalmente, otro programa integral de salud, formación profesional y prevención de la violencia de género en la República Dominicana, por el que la fundación ingresó 91.000 euros, está pendiente de revisión.

Respecto a los mecanismos de control del Gobierno de Navarra para verificar la correcta aplicación de las subvenciones, el informe apunta un cierto retraso en el análisis de la documentación justificativa. “Este retraso –dice la Cámara de Comptos- resta eficacia y oportunidad al control y seguimiento efectuado”. Por otra parte, no constan mecanismos de control alternativos, como la verificación in situ de la acción subvencionada.

El informe también señala que dos proyectos presentados por la fundación, cuya ejecución estaba prevista en Bolivia, se basan en el trabajo elaborado por funcionarios del Gobierno de Navarra que también han colaborado en la ejecución de los mismos.

Como reflexión final, la Cámara de Comptos subraya la necesidad de adoptar las medidas administrativas adecuadas para que situaciones como las descritas no se repitan, sobre todo teniendo en cuenta que las ayudas otorgadas a la fundación tienen como objetivo mejorar las condiciones de vida de la población más desfavorecida. El informe recomienda que se refuerce el control de las ayudas para proyectos de cooperación internacional y que se aprueben unas normas que regulen de manera especial este tipo de subvenciones.