2013/05 Coste de la interrupción voluntaria del embarazo en el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea

La Cámara de Comptos ha remitido al Parlamento un informe sobre el coste de la intervención voluntaria del embarazo, solicitado por el propio legislativo a instancias de los grupos Nafarroa Bai, Bildu e Izquierda-Ezkerra. En la petición trasladada a la Cámara de Comptos, los citados grupos solicitaban que se realizara una comparación entre el coste de dicha intervención en la clínica privada de Ansoáin y en los centros públicos. 

El informe señala que la interrupción voluntaria del embarazo está regulada en la Ley Orgánica 2/2010, de 3 de marzo, que contempla la posibilidad de hacerlo en las 14 primeras semanas a petición de la mujer; también es legal hacerlo por causas médicas si existe grave riesgo para la embarazada o anomalías en el feto, siempre que no se superen las 22 semanas de gestación; por último, en caso de anomalías fetales incompatibles con la vida puede interrumpirse el embarazo sin límite en cuanto al tiempo de gestación. 

La ley incluye la intervención dentro de las prestaciones de la sanidad pública, reconoce el derecho de objeción a los profesionales y, excepcionalmente, contempla el abono de la prestación en centros privados cuando los públicos no puedan ofrecer en tiempo la prestación. 

El informe explica que existen tres tipos de interrupciones del embarazo, según el tiempo de gestación: farmacológico, quirúrgico por aspiración, quirúrgico por dilatación y quirúrgico por inducción del parto. 

Tras la despenalización del aborto en 1985, en Navarra se hicieron diez intervenciones en los centros de Osasunbidea al amparo de los supuestos legales. En 1986, una asociación presentó una querella criminal contra tres ginecólogos y el director del Hospital Virgen del Camino por entender que una intervención realizada no se contemplaba en los supuestos legales. El proceso, rodeado de polémica, se saldó cuatro años después con la absolución de todo el personal acusado. A partir de entonces, hasta finales de 2011, no se practicó en Navarra ninguna interrupción del embarazo en el ámbito público ni privado, derivándose a las mujeres que lo solicitaban a centros de otras comunidades. En octubre de 2011 se inauguró en Ansoáin una clínica privada en la que se realizan las intervenciones hasta la semana 14 de gestación. 

Previamente, en abril de 2010 once ginecólogos afirmaron públicamente que no había razones para no ofrecer esa prestación en la sanidad pública, contestando la consejera de Salud que la objeción venía de otros colectivos: anestesistas y enfermeras. Ante esta situación, se creó un registro de profesionales objetores a la práctica de estas intervenciones, que cuenta actualmente con la inscripción de una persona. 

El informe de la Cámara de Comptos cifra en 437.000 euros el gasto de la interrupción voluntaria del embarazo en 2012. En ese año se realizaron 981 interrupciones, de las que 842 fueron en la clínica de Ansoáin, 104 en Zaragoza, 23 en Madrid y 12 en San Sebastián. La clínica de la localidad navarra percibió por esa prestación 352.000 euros. 

La Cámara de Comptos señala que en 2011, según un informe del Ministerio de Sanidad, la tasa de interrupciones de embarazo en navarra es de 6,9 por 1.000 mujeres, sensiblemente inferior a la media del Estado (12,4). El 55% de las pacientes es de nacionalidad española y la mayoría se encuentra entre los 20 y 34 años. Respecto a su nivel de estudios, el 34% había acabado Bachillerato o Formación profesional y el 27% tenía la ESO. Destaca el hecho de que un 39% de las mujeres a las que se realizó la interrupción del embarazo no había utilizado métodos anticonceptivos para prevenir el embarazo. 

Respecto a los costos, se han calculado los de los centros públicos en el caso de embarazos hasta la semana 14, que son los que se realizan en Ansoáin. En este sentido, la interrupción farmacológica ronda los 200 euros, mientras que el precio pagado a la clínica de Ansoáin es más del doble: 454 euros. 

En cuanto a la intervención quirúrgica con anestesia regional, la estimación del coste en el Servicio Navarro de Salud ronda los 550 euros, siendo similar a su derivación a la clínica de Ansoáin, San Sebastián o Bilbao, excluyendo los gastos de desplazamiento. Por último, el coste de la intervención con sedación supondría unos 600 euros en los centros de Osasunbidea, cifra ligeramente inferior a la clínica de Ansoáin y al coste en San Sebastián. 

La Cámara de Comptos concluye que, ante la aparente disponibilidad de profesionales para realizar este tipo de intervenciones, Osasunbidea debería considerar la posibilidad de realizar las interrupciones farmacológicas en centros públicos dada la diferencia económica entre el coste y la tarifa abonada a los centros privados. También se recomienda analizar la posibilidad de hacer en la red pública las interrupciones quirúrgicas en embarazos menores a 14 semanas de gestación, teniendo en cuenta tanto las variables económicas como otras, entre las que se cita el coste de oportunidad de ocupación de quirófano. En estos casos, el informe pide al Gobierno de Navarra que preste el apoyo necesario a los profesionales que realicen las intervenciones. 

En el caso de continuar realizando las interrupciones en el ámbito privado, el informe pide que un concierto establezca con las condiciones y procedimientos incluidos en la tarifa, ya que actualmente no existe. 

Por último, el informe solicita analizar con mayor profundidad el perfil de la mujer que se somete a este tipo de intervención para diseñar estrategias de prevención de embarazos no deseados y mejorar la educación y orientación sexual.